La psicomotricidad trabaja con la organización e integración de los movimientos del individuo en sus particularidades, integrando funciones cognitivas , socioemocionales, simbólicas, psicolingüísticas y motoras. Busca ayudar a las personas a optimizar su relación con su propio cuerpo, interna y externamente, en sus experiencias de movimiento.
Los cambios psicomotores pueden tener un impacto en el proceso de aprendizaje y provocar problemas que acompañan a las personas a lo largo de su vida.
Es importante prestar atención a los casos que ameritan una evaluación especializada, pues cuanto antes se realice la intervención mayores serán las posibilidades de que el niño recupere el desarrollo esperado y evite problemas futuros.
Algunas de las áreas de la actividad psicomotriz son:
- Esquema corporal: representación que tenemos de nuestro propio cuerpo.
- Lateralidad – definición de dominancia lateral.
- Orientación espacial
- Orientación Temporal
- Organización e interpretación de los estímulos que se obtienen a través de los órganos de los sentidos: oído, visión, tacto, gusto y olfato.
- Interacción de todas las percepciones con las actividades del cuerpo.
- Tonicidad.
- Balance
- Coordinación motora global y fina.
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